La obsesión por estar espléndidas ha llevado a algunas celebrities a someterse al «facial vampiro es ‘una técnica estética para rejuvenecer el rostro que implica inyectar la sangre del cliente en partes específicas de la cara con el fin de lograr una piel sin arrugas.
El Vampire Facial consiste en »extraer la sangre y centrifugar para separar el plasma de los glóbulos rojos y, tras realizar las microperforaciones, se inyecta el plasma en la piel para que esta luzca más fresca y jugosa». Eso fue lo que contó la influencer Gala González hace un tiempo en su canal de Youtube, donde compartió un vídeo sobre su experiencia con el tratamiento.
Sin embargo, el Vampire facial ha puesto en alerta al mundo de los tratamientos fáciles y claro está al panorama de salud, luego que tres mujeres a las que se les diagnosticó VIH después de someterse a “faciales vampíricos” en un spa médico no autorizado de Nuevo México serían los primeros casos documentados de personas que contraen el virus a través de un procedimiento cosmético con agujas, dijeron autoridades estadounidenses de salud.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC por sus iniciales en inglés) dijeron en su Informe de Morbilidad y Mortalidad difundido la semana pasada que una investigación a la clínica realizada entre 2018 y 2023 reveló que aparentemente se reutilizó equipos desechables destinados a un solo uso.
Este caso puso de relieve los riesgos asociados a las prácticas insalubres y la ausencia de controles adecuados en esteticistas no licenciados. María de Lourdes Ramos De Ruiz, la ex propietaria del spa, actualmente cumple una condena de 3 años y medio de prisión por practicar la medicina sin licencia, según informaron fuentes oficiales.
¿Cómo es el tratamiento facial vampiro?
El tratamiento “facial vampiro” consiste en la micropunción con plasma rico en plaquetas, un proceso que incluye la extracción de sangre del paciente, la separación de las plaquetas e inyección en la cara mediante microagujas.
A pesar de su popularidad, la investigación sobre este incidente destacó graves fallos en las medidas de seguridad e higiene del VIP Spa en Albuquerque, lo que incluía reutilización de materiales desechables, ausencia de esterilización adecuada y almacenamiento inapropiado de material biológico.
El procedimiento lo utilizaron en los últimos años celebridades como Kim Kardashian, quien publicó una foto de ella en Instagram después de recibir el proceso en 2013, aunque la estrella de reality show dijo que lamenta haberse sometido a esas inyecciones.
“Fue muy duro y doloroso para mí. Fue honestamente el más doloroso. Es el único tratamiento que nunca volvería a hacerme”, escribió Kardashian en su red social.
Una de las afectadas fue diagnosticada con VIH mientras se encontraba en el extranjero en 2018 y las investigaciones posteriores demostraron que ella y otras dos mujeres adquirieron el virus tras recibir el tratamiento en VIP Spa. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) confirmaron al menos dos casos de clientes que habían dado positivo a VIH antes de sus visitas al spa, destacando la probable reutilización de agujas o viales de sangre como las principales vías de transmisión.
El equipo de investigadores, incluida Anna Stadelman-Behar, epidemióloga de los CDC, subraya la anomalía de este grupo de VIH vinculado a procedimientos cosméticos. “Definitivamente, fue un shock para ellas”, comentó Stadelman-Behar, refiriéndose a las víctimas, quienes no tenían otros factores de riesgo conocidos para la adquisición del VIH. Este caso reaviva la discusión sobre la necesidad de procedimientos y controles más estrictos en los servicios cosméticos para prevenir exposiciones a patógenos mortales como el VIH y la hepatitis B y C.